Una de las mayores criticas al Arte Clasico, es que su perfeccion puede ser imitada o mejorada por una fotografia, aunque claro, quien penso esto no sabia nada del verdadero Arte, este puede provocar una reaccion emocional, creada por el autor, que la fotografia raras veces logra, ya que en el primero, el Artista esta en control de todas las variables y en el segundo, el fotografo, usualmente solo puede captar lo que le ofrece la realidad.
En una pintura se puede recrear, con mas emocion y colores, acciones que no pudieron haber sido fotografiadas, o que si bien existen fotos, estan no transmiten la emocion de una pintura, porque el Artista puede enfocar todo en un lienzo, concentrar la accion en algo que solo dura un segundo, que en la realidad, se puede perder de vista al pestañear.
Y con colores e iluminacion que ayuden al efecto emocional, por ejemplo resaltando algo con colores mas claros, algo imposible por las Leyes de la Naturaleza, como la niña brillante en Ronda de Noche del maestro de estos trucos, Rembrandt
En el Boxart podemos ver el mismo efecto en esta pintura de Lakewood:
El Corsair esta en el centro de la composicion, entre el humo de un dia nublado, apenas sugerido con borrones, muy a la Turner, pero podemos apreciarlo con una luz directa, y esta en perfecto estado, como un avion nuevo, sin las huellas del combate, el lodo, la tierra, las quemaduras de escapes, ametralladoras o las famosas fugas de combustible por las que era famoso el F4U-1A; o en otras palabras, esta aparente realidad, no es real, sino una expresion artistica pura.
Una de las pinturas que mejor expresa esto, es el viejo Boxart de USS Essex de Revell, tomando una accion instantanea en medio de la batalla, la explosion de un Kamikaze sobre su cubierta.
El buen Boxart es Arte en su maxima expresion.